No, aún no lo hago, pero ya sé qué voy a sentir cuando lo haga (imagine el lector que ya lo he hecho):
Me arrojé al vacío, perdón, a la vida independiente. El otro día vi una película llamada El Odio (La Haine de Mathieu Kassovitz); ahí se cuenta la historia de un hombre que se arroja de un edificio muy alto; mientras va cayendo se repite para tranquilizarse: "hasta ahora todo está bien..." así, hasta que se estrella con el pavimento. Lo mismo me repito yo: "hasta ahora todo está bien...".
Después de todo, creo que ya voy en picada.
(sábado 18 de agosto de 2007)
domingo, 10 de agosto de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario