sábado, 3 de octubre de 2009

Nada

Yo no tengo nada que escribir. Yo tengo miopía y últimamente mucha tristeza contenida. He estado trabajando entre 8 y 18 horas al día. Estoy agotada. No sé bien qué he ganado. Hoy me imaginé muerta y pude preguntarme a dónde me fui y me respondí a ningún lado... no sé si me explico: me vi como si yo hubiera sido asesinada por un narcotraficante, y me vi a través de sus ojos, y vi que yo para él era como un fuego que con agua se apaga y me apagué para siempre. Nada era porque nada fui. Y lo peor, lo peor de todo, es que esos pensamientos ya no me duelen, sólo me causan recóndita tristeza, porque nada tengo y eso lo entiendo bien.