jueves, 19 de diciembre de 2013

martes, 17 de diciembre de 2013

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Terminé con una antigua obsesión y fue tan difícil como fácil fue adquirir otra.







No tengo remedio.








lunes, 2 de diciembre de 2013

miércoles, 6 de noviembre de 2013

Pedacitos

Cada vez que has aparecido en mi vida, de la manera que sea, mi corazón ha dado un vuelco para al final caer hecho pedacitos. La última vez que desapareciste de mi vida me sumí en una de las depresiones más dolorosas que he tenido. Yo estaba tan mal y me preguntaba por qué y un día me desbaraté y lloré hasta que entendí: de alguna manera te habías convertido en el ser cuya presencia, aunque lejana, confería valor ja mi existencia; tu ausencia me hacía sentir vacía e insignificante. Tuve que reconstruirme pero sola; debía valer por mí misma, aunque no comprendía cómo podía yo valer porque sí.

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lunes, 14 de octubre de 2013

lunes, 23 de septiembre de 2013

Difusa

Entréguese de verdad al viento  y deje de ser de cartón y arena...


Boba y qué.
 

Difusa, inconclusa, tardía y qué.


Bolita

Las ganas de hacer bolita la propia vida y arrojarla muy lejos, cual bolita de papel arrugado con contenido fallido.

Las ganas de despojarse de uno mismo y su hábito introspectivo.

                                    

jueves, 19 de septiembre de 2013

Y no

Alguna vez tuve que matar el enorme amor que sentía. Lo ahogué. Ahora vivo aquí atrapada y apagada. He aprendido a ahogar-me. ¿En qué me he convertido? Si bien nunca tuve claro qué sería de mí, jamás se me ocurrió que podría seguir siendo la misma: la abúlica, la tímida, la seria, la mustia, la boba, la mala. Tenía que ser diferente, mejor, y no. Y no. Debería poder escupir cuanta cosa podrida vive en mí: mis pensamientos obsesivos, mis heridas, mis rencores, mis debilidades, mis errores. Siento vergüenza, siento tristeza. Cada día lo intento y cada día entiendo que fracasé, que me dejé destruir, que perdí las ganas y toda la esperanza y que si alguna vez destella en mí el deseo de volver a la luz, de inmediato y diligentemente, vuelvo aquí, a la desolación, a la muerte que soy.

sábado, 31 de agosto de 2013

Me dormí muy enojada.

Caminaba sintiendo una molestia en los ojos. La gente me miraba con desagrado. Encontré un restaurante-centro de salud. Corrí al baño y me miré al espejo. Mi ojo derecho estaba muy desviado, como si padeciera estrabismo. Me asusté mucho. Intenté con mis dedos acomodarlo. Al presionar ligeramente, mi globo ocular se partió, y un enorme tajo de éste salió disparado, acompañado de tejidos suaves y viscosos. Ay no. Rápido volví a (mal) acomodar todo dentro de la cavidad orbitaria correspondiente. Quedé muy decente pero con tiras de tejido óptico, color azul claro, colgando de mi ojo y... garganta. Casi podía masticarlo y saborearlo, así que procuré no comerlo. Por suerte me encontraba en un restaurante-centro de salud y de inmediato salí y solicité una consulta.

No amor


Amor. Nunca te llamé Amor. No besé detenidamente tu cuerpo, ni te vi dormir. Tus manos no se cansaron de mí. No me extrañaste. No me contaste tus sueños al despertar. No te molesté con mis largas reflexiones.  No te vi llorar. No te fastidiaron mis celos. Nunca te enojaste conmigo. No deseaste verme llegar a ti. No sufriste por mí. No me invitaste a hacer el amor.


Tu voz. Tus ojos. Tus historias.

Te perdí y no sé como irme. Eres ruido, eres luz.

 

martes, 30 de julio de 2013

Ojalá

A propósito de la desesperanza que me agobia recientemente. Sé que las personas que se encuentran en situaciones desesperadas, frente a humanos desalmados,  piden piedad; generalmente estas peticiones son ignoradas, vituperadas, desechadas, hechas polvo. El deseo irrefrenable de encontrar humanidad en los ojos de un victimario suele chocar con la nada.  Seres que se creen dueños de las personas: torturadores, asesinos, violadores, abusadores, menospreciadores de los derechos humanos; seres que duelen, que hieren, que destruyen con alevosía.  A ustedes, los de oídos sordos, los hipócritas, los injustos, los cobardes, me dirijo -como si mi pensamiento pudiera llegar tan lejos  como para humanizarlos y hacerlos sentir el sufrimiento ajeno- : no lastimen al inocente, a nadie; vivan en paz con ustedes mismos y con el prójimo, cuiden su alma, respeten a los otros y a sí mismos.
No veo por qué no. Los humanos somos seres racionales y podemos elegir y liberarnos de nuestros instintos malsanos.  Ojalá que sí. La buena voluntad ante todo.
 
"El babasaheb era un espiritista aficionado, golpeador de patas de mesa e introductor de espíritus en vasos. <<Pero ya lo dejé -dijo a su ahijado, con el gesto y ademanes melodramáticos que el caso requería-; lo dejé el día en que me llevé el susto de mi vida.>>
Una vez (relató Mhatre), el vaso fue visitado por un espíritu auténticamente servicial, un tipo superamistoso, sabes, y yo pensé que era la ocasión de hacer preguntas importantes. ¿Hay Dios? y aquel vaso que hasta entonces corría como un ratón, se paró en medio de la mesa, quieto, lo que se dice kaput. Y entonces yo digo está bien, si no contestas a ésta, veamos con esta otra, y le pregunto: ¿Hay diablo? A esto, el vaso, ¡chinchinchin!, empezó a temblar -¡tápate los oídos!-, al principio, despacio y, después, aprisa aprisa, como un flan, hasta que saltó -¡ale hop!- por el aire, cayó de lado y -¡cras!- se hizo mil añicos, pulverizado. Lo creas o no, dijo babasaheb Mhatre a su pupilo, en aquel momento yo aprendí la lección: Mhatre, no te metas en lo que no entiendes".

Salman Rushdie: Los versos satánicos.

jueves, 13 de junio de 2013

El gato o de lo que amo

Mira, lo único que me importa es el gato. Por favor, no lo dejes salir porque tenemos una vecina que mata gatos.


(Dígalo por escrito para que no le tiemble la voz, para que aparente tener mucho temple. Ya sé que su corazón no está en buen estado, pero eso no tiene que ver, pues, de lo contrario, a su tristeza crónica tendría que agregar tristeza crónica y nadie sabe qué sería de usted. Ha de ser recomendable cerrar los ojos, gritar por dentro y detenerse a escuchar a los pajaritos que parecen gorjear muy gustosos. Déjeme recordarle que algún día usted estará casi muerta de verdad. Considérelo.)

miércoles, 12 de junio de 2013

Helada





Y deseé ser un montón de huesos, de nada. Y oí crujir mi carne seca, helada, inerte.
Libre al fin.




lunes, 10 de junio de 2013

Dust and sun


Carol: This part of your kingdom's not so good.
Max: Why?
Carol: Well, look: this used to be all rock, and now it's sand, and then, one day, it's going to be dust, and then the whole island will be dust, and then... well I don't even know what comes after dust.
Max: Carol, did you know the sun was gonna die?
Carol: What? I never heard that... Oh, come on. That can't happen. I mean, you're the king, and look at me, I'm big! how can guys like us worry about a tiny little thing like the sun, hmm?


Spike Jonze: Where the wild things are (2009).

viernes, 24 de mayo de 2013

Persis Kalamanja

"La pobre Persis, que había perdido ya su amante corazón al dárselo a Ormus Cama, perdió muchísimo más aquel día en el almacén Rhythm Center. Perdió al propio Ormus y, con él, su futuro entero. Una vez que él encontró a Vina, se acabó todo para Persis, como se podía ver a simple vista. Vina y Ormus no se habían tocado siquiera, ninguno de los dos sabía el nombre del otro, pero sus ojos estaban ya haciendo el amor. Después de haber plantado Ormus a Persis, ella aprendió que un ser humano puede creer a la vez dos cosas contradictorias. Durante mucho tiempo, creyó que él volvería a ella, sin duda, cuando comprendiera cuán verdadero era el amor que había desdeñado, más verdadero que nada que aquella niña devuelta de América pudiera darle; y al propio tiempo sabía también que Ormus nunca volvería a ella. Esas dos tesis, de fuerza igual y contrarias, la paralizaron y nunca se casó, ni dejó de quererlo hasta el final mismo, en que, después de haber terminado la serie de catástrofes, recibí una carta de ella. La pobre Persis, todavía en poder de Ormus aunque él no vivía ya, me abrió su pecho con una letra elegante y madura que hablaba de su firme carácter. Sin embargo, ni siquiera aquella mujer impresionante había podido defenderse de la fuerza elemental de Ormus Cama, de su debilidad, de su voltaje, su encanto, su crueldad despreocupada, su vida. Él la quebró y la olvidó".

Salman Rushdie: El suelo bajo sus pies.


jueves, 16 de mayo de 2013

Sin saber qué hacer

Perdido en mi habitación
con todo al revés
se pasan las horas sin saber qué hacer*
  


Tengo dentro de mí un enorme desastre. 






*Fragmento de Perdido en mi habitación de Mecano.

martes, 23 de abril de 2013

Limo


"El río de mi vida se detuvo en su carrera y se extendió en un vasto estanque bello a la vista, que reflejaba el cielo y las estrellas, pero si se hundía en él un bastón, el agua era baja y el fondo estaba lleno de limo y podredumbre".

Mika Waltari: Sinuhé, el egipcio.



miércoles, 3 de abril de 2013

El futuro

Y sé muy bien que no estarás.
No estarás en la calle
en el murmullo que brota de la noche
de los postes de alumbrado,
ni en el gesto de elegir el menú,
ni en la sonrisa que alivia los completos en los subtes
ni en los libros prestados,
ni en el hasta mañana.
No estarás en mis sueños,
en el destino original de mis palabras,
ni en una cifra telefónica estarás,
o en el color de un par de guantes
o una blusa.
Me enojaré,
amor mío,
sin que sea por ti,
y compraré bombones
pero no para ti,
me pararé en la esquina
a la que no vendrás
y diré las cosas que sé decir
y comeré las cosas que sé comer
y soñaré los sueños que se sueñan.
Y sé muy bien que no estarás
ni aquí dentro de la cárcel donde te retengo,
ni allí afuera
en ese río de calles y de puentes.
No estarás para nada,
no serás mi recuerdo
y cuando piense en ti
pensaré un pensamiento
que oscuramente trata de acordarse de ti.

Julio Cortázar

miércoles, 20 de marzo de 2013

Y al final, el principio.

No tengo por qué estar bien. No sé a dónde ir. Me siento como una gelatina verde desabrida con mucho sueño. Me arrojo todos los días a la vida. Despierta y sigue. Al fin, vuelvo a casa desgreñada, empolvada y seria. Hum. ¿A qué conclusión has llegado, niña con sueño? He aprendido poco. La humildad es importante. Es más fácil no entender nada. Diga usted la verdad, aunque todo se acabe. Duerma. No explote. Intente comer frutas y verduras. Pregúntese: ¿me pellizcó a propósito? La gente cruel ha sido herida. Te puedes romper el cuello si das una maroma para atrás. Al final volverás al principio. El tiempo te come. Los gatitos leen la mente. No soy una niña. Las patitas de los gatos.  En la noche, no es la luna la que se mueve, sino las nubes. Parece que nadie lee tu mente. Si quieres tener amigos, aprende a contar historias (divertidas). Es rico gritar. No te sonrojes; es vergonzoso. En la madrugada hace mucho frío. Nunca nada sucede como lo imaginas. No acumules basura en casa. Por mandar precipitadamente todo al diablo, puedes perder la vida o lo bonito de la vida. Encuentra la paz. Desea el bien.  Canta:

Minka tiene en sus ojos tristes la espezanza viva; por la tierra blanca viene caminando Minka...

No tengo por qué estar bien. Una arañita corre despavorida, pobre.

jueves, 7 de marzo de 2013

Muerta

Tú, para mí, estás muerta.

Muchos saludos,

tu mamá.
No sé quién lo escribió. Lo leí hace tiempo y lo escribí en un cuaderno. Era una historia sobre una niña gorda que no era una niña, sino una mujer que parecía niña, y que escribía frases como esa.


miércoles, 6 de marzo de 2013

Ay no

He sentido por ti muchas cosas, sobre todo amor. He pensado en ti una y otra vez, obsesivamente. He intentado todo lo que he podido para olvidarte y nada ha funcionado. Te he buscado en cada sueño lúcido que he tenido (me quedo muy desconcertada a mitad del camino, muy perdida, y pienso: ay no). Cada vez que has aparecido en mi vida, de la manera que sea, mi corazón ha dado un vuelco para al final caer hecho pedacitos. La última vez que desapareciste de mi vida me sumí en una de las depresiones más grandes y dolorosas que he tenido. Yo estaba tan mal y me preguntaba por qué y un día me desbaraté y lloré hasta que entendí: de alguna manera te habías convertido en el ser cuya presencia, aunque muy lejana, confería valor a mi existencia; tu ausencia me hacía sentir vacía e insignificante. Tuve que reconstruírme pero sola, sin ti, sin nadie; debía valer por mí misma, me dije, aunque no comprendía cómo podía yo valer porque sí.
Yo entiendo qué significan estas palabras y por qué lloro mientras las escribo pero creo que no te afectará mi absoluta ausencia. Tengo que irme por mi bien, pues ya es tiempo de liberarme de todo esto. Los años han pasado y yo sigo atrapada en el momento en que me enamoré de ti y perdí la noción del tiempo y el espacio y en el momento en que se me rompió el corazón y me volví gris. Un amor equivocado es el mío y lo acepto. Ya no quiero esperar más, ya no quiero hacerme daño con esto. Creo que debo crecer y seguir. Un amor fallido. Agradezco haberte conocido y haberte querido tanto porque sé que eres bello y bueno, y te deseo lo mejor del mundo. Adiós.

martes, 29 de enero de 2013

Estoy hecha de voces, muchas voces: nunca estoy sola.

Sonrío sinceramente, aunque no lo creas.

 Estoy un poco cansada de contar mi historia, mis historias.

Mi corazón arde, ardía.

Por favor, no.




viernes, 25 de enero de 2013

Arena

Se estremeció. 
Con esa sensación de frío, en medio de una tarde calurosa, de que la vida ya ha sido vivida. De que su copa estaba llena de polvo. De que el aire, el cielo, los árboles, el sol, la lluvia, la luz y la oscuridad, todo, se estaba convirtiendo, lentamente, en arena. Que la arena le llenaría la nariz, los pulmones, la boca. La arrastraría hacia abajo y dejaría un remolino en la superficie como el que dejan los cangrejos cuando se hunden escarbando en la playa. 


Arundhati Roy: El dios de las pequeñas cosas (fragmento).

Inocuos


--Ammu, si eres feliz en un sueño, ¿cuenta?*




*Arundhati Roy